12/4/2019
Vivir mejor, o al menos de forma parecida, que nuestros padres. Una máxima del Estado de bienestar apoyada en la igualdad de oportunidades y el ascensor social. O así era, al menos, hasta la recesión de 2008. Hoy (…) apenas la mitad de los jóvenes pueden acceder a la clase media en España. Son muchos menos de los que lo conseguían en las generaciones anteriores, según datos que acaba de publicar la OCDE en un estudio titulado Under Pressure: The Squeezed Middle Class, donde se estudia el empeoramiento de las condiciones de vida de la población desde el inicio de la crisis (…)
Entre los nacidos entre 1942 y 1964, seis de cada diez jóvenes conseguían acceder a la clase media. Para la siguiente generación, aquellos que crecieron entre 1965 y 1982, el porcentaje se redujo ligeramente, hasta el 58%. Y entre los conocidos como generación ‘millenial’, nacidos a partir del año 1985, las consecuencias de la crisis y la desigualdad han terminado por expulsar a muchos de ellos del modelo de bienestar: solo la mitad de los jóvenes ha conseguido acceder a la clase media tras cumplir los 20 años. Son diez y ocho puntos menos que en las generaciones precedentes.
Según la OCDE, se considera que una persona pertenece a este grupo de población si posee una renta situada entre el 75% y el 200% del sueldo medio del país de referencia. En el caso de España, esto suponen unos ingresos no excesivamente altos, situados entre los entre los 11.500 y 30.500 euros anuales, aproximadamente.
Etiquetas: clase media, clase obrera, clase trabajadora, clases sociales, crisis, crisis económica, Estado de bienestar, jovenes, juventud, neoliberal, neoliberalismo, ni nis, pobreza, pobreza educativa, pobreza España, pobreza se hereda, precariado, precariedad